top of page
Foto del escritorMgt Cristian Pernett

Superando una infidelidad

Actualizado: 9 nov 2022


En la vida de pareja la infidelidad es uno de los grandes temores que enfrentan las parejas, sobre sobre todo cuando la rutina del día a día parece haber apagado ese llama de la pasión. Pero en este artículo no vamos a centrarnos en las razones de la infidelidad, sino en cómo superarla cuando se ha dado. Y claro está, que “superar” una infidelidad no implica que la relación continúe. Después de analizar las decenas de casos que han llegado a mi consultorio, y revisando información de diversos autores sobre este tema, les resumí en 5 pasos, un plan de acción para abordar esta difícil situación de la infidelidad.


5 pasos para superar una infidelidad.



Acepta lo ocurrido. Lo peor que se puede hacer cuando una persona nos ha sido infiel, es pretender evadir la situación, negarnos al dolor y hacer como si nada hubiera pasado. Y es claro para nosotros, los terapeutas de pareja, que la negación es la respuesta más predecible ante un shock de este tipo, pero no podemos tapar el sol con un dedo, porque solo la aceptación de los hechos nos puede abrir el camino inicial hacia una posible solución. Así que Armate de valor, quítale poder a la voz de tu ego herido, y deja que la voz irrefutable de los hechos cuente la verdad.


Expresa tus emociones.


La honestidad emocional es fundamental es este proceso. Ya que en nuestro afán por actuar según nuestros guiones de vida (Como nos criaron y dijeron que debíamos ser) podemos reprimir lo que sentimos para mantener el papel de, “soy una persona buena” y pacífica, o explotar bajo la bandera de

“a mí nadie me hace eso” pero la pregunta es ¿Qué es lo que de verdad siento?; y una vez que etiquetas la emoción que experimentas y que te permites sentirla, analiza que discurso hay tras esta emoción, ya que ahí se oculta la motivación de ese dolor emocional y también sus soluciones. Por ejemplo: ¡Lo que más me duele es que no me lo dijeras!, en este caso el dolor va por la falta de comunicación, que en sí es una de los causales de distanciamiento emocional y sus nefastas consecuencias.

Dile a tu pareja lo que Tú SIENTES y claro analiza tu responsabilidad en los hechos.


Tómate tu tiempo.

Muchos de los problemas en el rápido perdón es que no realizamos un análisis a fondo de lo sucedido, y nos victimizamos en el proceso, y como consecuencia de ello nos perdemos las enseñanzas que podrían salvar la relación. Debes tomar tiempo para analizar dos puntos muy importantes; el primero es relacionado con tu responsabilidad en la infidelidad. ¡Sí, así como lo lees!

Es que resulta que en las relaciones de pareja, no existen las polaridades de buenos y malos, todos somos responsables por acción o por omisión, y si no asumimos nuestra responsabilidad, jamás podremos superar una infidelidad. Vemos un ejemplo típico que veo en terapia, hombres y mujeres que descuidan sus responsabilidades sexuales por dejarte absorber por otro rol de vida, sea ser padres o temas laborales… no es una justificación para qué sé de una infidelidad, pero sin dudas no eres inocente en este episodio. Solo entendiendo las razones pueden construir un cambio real.

Segundo debes hacerte la pregunta, ¿puedo pasar por alto esta afrenta? ¿Va contra de mi escala de valores? Recuerda perdonar no implica seguir en la relación. Toma tu tiempo y escucha a tu corazón, pero sobre todo a tu razón.


Toma una decisión.


Dependiendo de las respuestas que obtuviste en las preguntas anteriores, analiza las virtudes de tu pareja versus sus defectos. Y analiza de verdad cuál suma más. La verdad sea dicha en el mundo del amor, lo que no suma resta. Eso sí, piénsalo bien, que sí es un sí; se aborda el tema, se pactan los cambios y se pasa la página… no es quedar en el bucle eterno de pelear siempre por ese mismo evento una y otra vez. Si gana él no, pues termina y cierra el ciclo, no entres en dinámicas tóxicas de quedar de amigos o de parejas sexuales esporádicas. UN ¡NO! ES TERMINAR TODO VÍNCULO DE PAREJA. Si hay hijos, mantener una relación de padres, es decir, hablar solo lo referente a los hijos. Ya que las medias tintas en estas situaciones suelen ser más destructivas que los hechos que los llevo a la separación. Si te cuesta tener claridad, antes de dar el paso apresurado, visita un terapeuta que te dé un apoyo objetivo del caso.


Aprende a perdonar.

Una vez analizado los puntos anteriores, con ánimo de ir dando una conclusión a este difícil tema, recapitulemos… Ya sabemos que también somos responsables de la infidelidad por acción u omisión, y recordemos que fallar es de humano, todos lo haremos de alguna manera lastimaremos a quienes más amamos. Pero esto no es del todo malo, ya que también es cierto que salvo contadas excepciones, nadie daña deliberadamente a su pareja; y si aprendemos a hacernos responsables de nuestra parte de responsabilidad, y somos empáticos, es posible sacar valiosas enseñanzas para reinventar una relación que venía muriendo de a poco, y volver a ser pareja de una forma distinta, madura, desde la realidad de la humanidad imperfecta que somos. Y si es posible cambiar las razones que los llevo a ese distanciamiento que permitió que entraran más en la relación. Es posible que de ese mal momento puedan cimentar el inicio de su mejor versión.


Y si no es la caso, no es fracasar terminar una relación que no suma felicidad, paz y deleite; en tal caso, fracaso sería mantenerla así por presiones sociales o miedo al que dirán. Perdonar a otro es entender que también nos gustaría ser personados, que perdonar en el amor es soltar el rencor, pero no necesariamente continuar juntos… y sobre todo, perdonar es algo que lo haces por ti, nunca es por el otro. Es liberarte del dolor emocional y pasar la página, para escribir nuevas y más positivas experiencias emocionales, solos o en pareja.



43 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comentários


bottom of page